Seguro que todos los automovilistas han visto al menos una vez las señales de «80 en mojado» en la autopista. Pero, ¿quién se ha fijado en ellos y qué significa realmente «mojarse» para el legislador? ¿Es lo mismo que el término general o se «moja» mucho antes de lo que piensa el ciudadano alemán medio?
En primer lugar, echa un vistazo al texto de la ley, porque nadie tiene muy claro lo de la humedad mencionada.
«La señal adicional ‘En condiciones de humedad’ es efectiva y se aplica cuando toda la calzada tiene una película de agua (BGHSt 27, 318 = NJW 78, 652 = StVE No. 11). Según esto, existe «humedad» cuando los detalles estructurales de la superficie de la carretera ya no son reconocibles. El requisito previo es la clara humectación de toda la calzada (BGHSt 27, 318 = NJW 78, 652 = StVE nº 11), no sólo debe estar húmeda o mojada en algunos lugares (roderas) (OLG Hamm VRS 53, 220 = StVE nº 8).»
Hasta aquí el texto legal, que en realidad plantea más preguntas que respuestas. Porque en algunas carreteras, dependiendo del estado de la superficie, a las pocas gotas ya se forma una película de agua. Algunas superficies son mucho más susceptibles, y suelen estar marcadas con una señal de «aquaplaning». Pero primero un paso más hacia los eruditos de los departamentos jurídicos.
«La señal se aplica durante la lluvia de cualquier intensidad y poco después. Para la jurisprudencia (OLG Celle VRS 53, 128 – Az. 1 SS WI 553/76) «no es lo suficientemente clara e inequívoca como para poder sancionar una infracción del límite de velocidad condicional como infracción administrativa».
Así que resulta que uno puede escabullirse de un incidente agudo, ya sea un exceso de velocidad y el aviso de multa que lo acompaña, mediante asistencia jurídica. No obstante, la humedad se resuelve con un «todavía me encuentro bien, así que me lo permito». En mi opinión, húmedo no siempre significa mojado. Basta con que el coche de delante arrastre una espesa nube de spray tras de sí, entonces la carretera está razonablemente seca, pero las condiciones siguen siendo malas, porque no puedo ver realmente lo que ocurre delante de mí o del coche que me precede.
Otro estado de humedad es cuando salgo de mi «zona de confort» personal. Es cuando me siento demasiado incómodo para conducir a una velocidad a la que otros lunáticos siguen dispuestos a conducir. Normalmente se ponen menos en peligro a sí mismos que a los demás. ¿Por qué? Porque el ciudadano medio no espera que una limusina venga por detrás a toda pastilla bajo una lluvia torrencial. El rocío y la lluvia torrencial impiden ver. Y digamos una cosa: ¡ninguna tracción a las cuatro ruedas ayuda con el aquaplaning! ¿Estás buscando y no sabes dónde comprar un coche de ocasión? En el concesionario de coches de segunda mano Crestanevada podrás encontrar el coche de segunda mano de tus sueños al mejor precio online.