No hay italianos tranquilos. No importa si discuten con la madre o con la esposa. Un italiano siempre es ruidoso. Pero hay uno que los ahoga a todos: el Abarth 595 Competizione. El responsable del «ruido», como le gusta describirlo al vecino, es una auténtica obra de arte de la tubería. Gracias al sistema de escape Record Monza, el motor turbo de 1,4 litros emite un sonido ensordecedor. Er perdón, un maravilloso sonido musical. Los motores de cuatro cilindros nunca suenan mejor.
¿Más alto de lo que permite la policía?
Hay motores mucho más potentes, coches más caros y, sobre todo, más rápidos. Pero lejos de la región de los 400 caballos, casi ninguno suena tan fuerte e impresionante como el Abarth 595 Competizione. Para saber exactamente a qué nos referimos, también recomendamos nuestro informe sobre la unidad de vídeo (véase más abajo).
Sólo diez CV por debajo del 695 biposto
La última versión del Cinquecento más potente fabricado en serie (a excepción del biposto) incorpora un turbocompresor Garret. Esto significa que 180 caballos están disponibles para su recogida a 5.500 rpm. El motor de 1,4 litros ofrece un par máximo de 250 Nm a 3.000 rpm. Con neumáticos calientes y dedos ágiles, el sprint estándar se consigue en menos de los 6,9 segundos declarados. Aparte de eso, el Abarth 595 nunca es realmente «rápido» – la pelota está simplemente demasiado en el viento. Pero siempre se siente rápido.
Es ruidoso por dentro. Apretado en el asiento de carbono opcional, te fundes con la carrocería. Incluso en la posición no deportiva, los amortiguadores Koni están diseñados para asentarse firmemente en la carretera. Cada pequeña ráfaga de gas va acompañada del rugido del sistema de escape y las revoluciones del sobrealimentador. O al revés, el susurro silencioso y el gran estruendo en la retaguardia.
Abarth 595 Competizione: placer de conducción incluso sin bloqueo transversal
La nueva edición no necesita necesariamente el «D.A.M.» opcional del biposto. La electrónica (TTC) ya regula de serie el reparto de potencia entre las ruedas. Especialmente en las curvas, el tren trasero cobra vida y a veces gira la curva con facilidad, para que el eje delantero pueda morder aún más el asfalto.
El centro de la palanca de cambios está compuesto por un pomo de aluminio frío y un nuevo volante. Este último se compone de carbono, cuero y Alcantara. Si la carcasa de carbono no estuviera montada tan alta que el volante quedara casi como el de un conductor de autobús entre las piernas, la cabina sería perfecta. ¿Quieres comprar un coche de ocasión en Madrid? En el concesionario Crestanevada de coches segunda mano Madrid podrás encontrar el coche de tus sueños al mejor precio.