El auge de la digitalización y la conexión en red no puede detenerse, pero parece que el factor seguridad se ha quedado a menudo en el camino. Sobre todo por la noche, siempre me pregunto: ¿es necesario? Sus ojos se centran en la calle escasamente iluminada, intentando cubrir periféricamente un amplio campo de visión, y aun así le cuesta mantener los ojos abiertos sin problemas. La causa se identifica rápida y fácilmente: el sistema de infoentretenimiento de la consola central. ¿Estás buscando y no sabes dónde comprar un coche de ocasión? En el concesionario de coches de segunda mano Crestanevada podrás encontrar el coche de segunda mano de tus sueños al mejor precio online.
En la mayoría de los casos, las pantallas están equipadas con una función denominada «nocturna». Este aspecto varía de un fabricante a otro. A veces los colores cambian de amarillo claro/beige a azul oscuro. A veces simplemente se baja un poco el brillo. En muchos casos, sin embargo, se echa en falta una función muy importante, sobre todo para conducir de noche y aliviar la vista: el botón de apagado de la pantalla. Simplemente apáguelo cuando no necesite la pantalla de todos modos, porque el anuncio de navegación se hace normalmente de forma acústica o visual en la unidad del velocímetro.
Aquí es donde radica el siguiente problema, aún mayor. La iluminación de la unidad del velocímetro suele ignorarse por completo. Esto significa que el conductor no puede ser deslumbrado por el sistema de navegación, etc., sino por las palancas selectoras iluminadas o las ruedas de ajuste del aire acondicionado, que tienen que brillar especialmente porque, de lo contrario, no se pueden encontrar, y por las manecillas giratorias del salpicadero.
¿Cómo puede ignorarse algo así? Una iluminación tan parcialmente deslumbrante debe llamar la atención durante las pruebas. Ni siquiera un piloto de pruebas entrenado puede mantener esto mucho tiempo. ¿Quién piensa entonces en el cliente final, que conduce un coche en parte porque tiene que conducir y no porque sea su vocación? Un conductor que, en determinadas circunstancias, no puede evitar conducir de noche, pero lo odia. Y ni siquiera se apoya en una iluminación suave, direccional y sensata, sino que se distrae del carril con luces de discoteca chillonas, exageradas y sin sentido.
Una gran queja de la industria automovilística, que lleva mucho tiempo pidiendo a gritos una mejora, pero hasta ahora esos elementos chillones se siguen encontrando en los coches nuevos de fábrica. Déjate de exageraciones, vuelve a la mesa de dibujo y piensa con lógica. Por favor, querida industria, piense en aquellos que no sólo sacan el coche los domingos para lavarlo, sino sobre todo en aquellos para los que el coche es vital, que tienen que recorrer con él distancias de varios kilómetros.