En los últimos días, semanas y meses, Volvo ha sido noticia una y otra vez por sus perspectivas sobre futuras cadenas cinemáticas, proyectos o vehículos. Pero veamos lo que Volvo ya ofrece actualmente, por ejemplo con el Volvo V90 D3 AWD. Un motor diésel con 150 CV y, gracias a la tracción total en este caso concreto, más par motor de un máximo de 350 Newton metro. Informe de conducción. ¿Quieres comprar un coche de ocasión en Almería? En el concesionario de coches de segunda mano Crestanevada Almería podrás encontrar el coche de tus sueños al mejor precio.
La versión estándar del Volvo V90 D3 con su turbodiésel de 2,0 litros sólo tiene 320 Nm. Pero con la adición de AWD, hay más par motor y antes. Esto significa que el par máximo ya está disponible a partir de 1.500 rpm, lo que hace posible una conducción relajada y relativamente eficiente en cuanto al consumo de combustible. Teniendo en cuenta el peso en orden de marcha de 1.915 kilogramos, el motor pequeño no tiene por qué ser la primera opción.
Pero corre, también corre por encima de 200 en la pista. Una vez alcanzada esta velocidad de crucero atípica de Volvo, puede mantenerla bien. Sólo que el camino hasta allí es un poco duro. Por tanto, el par extra se nota más en carreteras comarcales al adelantar.
Pilot Assist II en un control de larga duración en la autopista alemana
En general, sin embargo, el gran patrimonio se siente más cómodo hasta que el Pilot Assist II sigue activo. Entonces, el genial sueco consigue mantenerse relativamente fiel a la línea, incluso sin un vehículo delante. Sin embargo, la mano sigue teniendo que estar en el volante. La mano en el volante es entonces directamente consciente de las intervenciones algo bruscas, porque al Volvo le gustaría conducir centrado. Pero aunque la mano la guíe centrada, le encuentra fallos y corrige. En pocas palabras, a Pilot Assist II le gustaría tomar ya hoy la delantera.
Cuando se trata de seguridad de serie y opcional para los ocupantes y otros usuarios de la carretera, el V90 no tiene rival. Sea cual sea la dirección que tome un accidente, estás protegido en el Volvo. Entre otras cosas, por el acero al boro conformado en caliente. El material más duro no se utiliza actualmente en ningún coche. Por último, el alto nivel de seguridad, si no el diseño interior sueco fresco pero chic, quizá también se refleje en el precio. A 77.110 euros, el coche de pruebas se desvía del precio base del D3 en más de 35.000 euros.