Los trasplantes de unidades foliculares capilares (FUT) extraen el cabello en una tira de la parte posterior del cuero cabelludo y reubican estos folículos en otras zonas del mismo. El procedimiento FUT, también conocido como método de extracción en tiras, produce resultados de aspecto natural con pelos trasplantados que están más juntos.
Durante una intervención de trasplante capilar FUT, el cabello se extrae de la parte posterior del cuero cabelludo en una sola tira. A continuación, la disección microscópica permite que las unidades foliculares individuales -normalmente en grupos de uno a cuatro cabellos e incluyendo glándulas sebáceas, nervios, un pequeño músculo y ocasionalmente finos pelos vellosos- se extraigan intactas de esta tira sin ser dañadas. Cada unidad folicular se trasplanta como un todo, lo que garantiza un crecimiento óptimo del cabello.
El método de recolección FUT permite separar las unidades foliculares con precisión bajo el microscopio, lo que reduce la probabilidad de transección del injerto -el corte inadvertido en dos durante la escisión- y aumenta la tasa de supervivencia del injerto cuando se trasplanta.
Avances en la cirugía de trasplante capilar
Las primeras cirugías de trasplante capilar de mediados y finales del siglo XX consistían en trasplantar injertos de 4 mm, o «tapones capilares». La introducción del procedimiento FUT, más agradable desde el punto de vista estético, ha permitido a los cirujanos distribuir el cabello donado en zonas más amplias del cuero cabelludo, eliminando prácticamente el aspecto de «pelo de muñeca» de los tapones capilares.
La tecnología actual de strip-harvest implica el uso de injertos «delgados» y la realización de incisiones más pequeñas con herramientas ultrarrefinadas que permiten al cirujano de trasplante capilar colocar los injertos de unidades foliculares aún más juntos, minimizando así el número de procedimientos de trasplante capilar que puede necesitar un paciente.
Debido a que el método de cosecha de tiras FUT produce una cicatriz lineal a través de la parte posterior del cuero cabelludo, el cirujano capilar ha mejorado el procedimiento mediante la adición de la terapia ACell y PRP a los márgenes de la zona donante durante la cirugía, la mejora de la curación y la reducción de la cicatriz. El resultado es una cicatriz casi indetectable, similar a un pliegue en la palma de la mano.
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