Tus cejas son escasas, la naturaleza no te dotó de cejas pobladas y estructuradas. Así que deja paso a un nuevo método revolucionario que acaba de irrumpir en el ámbito de la belleza, el microblading, que permite reconstituir y esculpir las cejas de una forma más fiel a la realidad.
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¿Qué es exactamente el microblading?
En lugar de maquillarse las cejas cada mañana, ¿por qué no optar por esta nueva técnica de maquillaje semipermanente con resultados «duraderos» y, sobre todo, ultra naturales? Tras conquistar Estados Unidos, el microblading llega a España.
El microblading procede de una técnica ancestral asiática y también se denomina 6D. El principio del microblading es reestructurar una ceja de forma más real que natural, señala Cocoon Imagen, especialistas en microblading Granada. También se trata de crear, como en caligrafía, cejas utilizando un bolígrafo metálico y nanoagujas unidas en la misma línea para formar una fina hoja. De hecho, esta forma de hacer las cosas permite obtener una réplica perfecta de la ceja ideal en sólo una hora.
Microblading, ¡el bordado de las cejas!
El profesional rediseña la ceja y rellena los huecos dibujando una línea ultrafina que imita el vello a la perfección. Por eso, el efecto natural está garantizado y esto, al final del servicio. En efecto, este prometedor método consiste en pigmentar con agujas las capas superiores de la epidermis. Es decir, 0,2 / 0,3 mm bajo la epidermis, mientras que el dermógrafo eléctrico del maquillaje semipermanente llega hasta 0,5 / 0,8 mm. Además, el microblading no daña las cejas, ya que no se tocan los bulbos, por lo que no hay problemas de crecimiento del vello. Aproximadamente tres semanas después, es necesaria una segunda sesión de retoque para fijar el trabajo de pigmentación y garantizar un efecto duradero de aproximadamente un año y medio.
¡Microblading con efectos «duraderos»!
A diferencia del maquillaje permanente, que a veces puede volverse rojo o azul con el paso de los meses, el microblading es duradero. Además, desaparece gradualmente al cabo de un año y medio.
Microblading: ¿duele?
Como las agujas penetran menos profundamente en la piel, no tocan las terminaciones nerviosas que causan el dolor. Por ello, esta técnica es mucho menos dolorosa que el maquillaje semipermanente. Además, suele haber menos hemorragias. Por lo tanto, el proceso de curación también es más rápido. Y no hay molestas costras en los días posteriores al procedimiento.
¿Podemos adoptarlo todos?
Sí, no hay contraindicaciones particulares. Sólo tienes que ser mayor de edad. Y como el microblading es apto para todos los colores de piel, puede realizarse en cualquier tono de piel.
Pero, ¿cuál es su precio?
Hay que contar unos 500 euros por las dos sesiones (la inicial y la de retoque, tres semanas después).