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Automatización de máquina a máquina
Hoy en día, los sensores inteligentes pueden incrustarse en prácticamente cualquier máquina y producto manufacturado, permitiendo que diversos dispositivos y objetos se comuniquen entre sí. Con estos sensores, los sistemas IoT pueden interactuar y permitir así la automatización de operaciones como la compra de materias primas y componentes, la previsión de la demanda o la distribución sin interacción ni intervención humana.
Para los fabricantes, la mejor manera de aprovechar al máximo los datos de IoT y la automatización de máquina a máquina es integrarlos con una solución de software empresarial, como un sistema ERP (planificación de recursos empresariales). De este modo, los fabricantes pueden supervisar el rendimiento de la fabricación y recopilar la información deseada en un único sistema haciendo que el ERP interactúe con los productos y las máquinas, señala Galdón Software.
PaaS: una oportunidad
Las tecnologías IIoT y de sensores permiten a los fabricantes integrar en sus empresas modelos de producto como servicio (PaaS), que agrupan una serie de productos y servicios. PaaS puede ofrecerse a los clientes como un paquete de servicios de suscripción vinculados al producto. Por ejemplo, un producto puede venderse con funciones de suscripción adicionales o con un contrato de servicios.
El modelo de negocio de producto como servicio permite a los fabricantes generar ingresos adicionales cobrando a los clientes una cuota de suscripción recurrente basada en el uso o el valor aportado, en lugar de venderles un producto por una cuota inicial única.
Informática distribuida
Uno de los mayores retos para los fabricantes que buscan integrar más tecnología IoT en sus operaciones es el coste del ancho de banda necesario para procesar los datos. En el pasado, los fabricantes descargaban esta tarea de sus redes locales a servidores remotos, una solución que podía resultar costosa cuando el volumen de datos era elevado.
La informática distribuida invierte esta situación: en lugar de utilizar servidores remotos, aprovecha el borde local de la red informática. Con los nuevos avances, esta tecnología evita la necesidad de transportar los datos a una ubicación remota para su procesamiento; en su lugar, la red de borde local de una planta puede gestionarlos con sus propios dispositivos. Esto no sólo es más rápido y eficaz, sino fundamentalmente más seguro.
La informática distribuida permite a los fabricantes utilizar más sensores para procesar más datos con el fin de mejorar la productividad y el rendimiento.
Seguimiento por ubicación
Todos conocemos el GPS, sus usos y ventajas en un entorno exterior. La tecnología IoT permitirá ahora a los fabricantes aprovechar todas las ventajas del GPS, pero dentro de sus propias fábricas.
Wi-Fi, balizas BLE, sensores, UWB, RFID y otras tecnologías inalámbricas son la base de los RTLS, o sistemas de localización en tiempo real. Los RTLS permiten a los fabricantes cartografiar el interior de sus fábricas y seguir el movimiento de sus productos. Los RTLS de interior pueden ayudar a localizar los productos dentro de la fábrica y seguir su evolución a lo largo del proceso de fabricación. Esta tecnología influirá enormemente en el seguimiento de inventarios, la planificación de la producción y el control de calidad de los fabricantes.
Análisis de la cadena de suministro IoT
Gracias a IoT, la analítica ha avanzado lo suficiente como para cambiar el mundo de la fabricación. ¿El siguiente paso? La analítica de la cadena de suministro. Mientras los fabricantes siguen luchando con sus cadenas de suministro, las tecnologías IoT les ayudarán.
Combinado con ERP, IoT dará a los fabricantes una visión sin precedentes de la cadena de suministro. Con sensores y otros gadgets IoT, los empleados encontrarán siempre los suministros y mercancías que necesitan. Pero hay más: los sistemas ERP también analizarán e intercambiarán datos dentro de la empresa. Estos equipos ayudarán a los fabricantes a gestionar mejor todo su negocio tomando decisiones más informadas sobre todo, desde la gestión del inventario hasta las relaciones con los proveedores.
Muchos de los productos más complejos o de gama alta que ofrecen los fabricantes norteamericanos se fabrican ahora casi en su totalidad con componentes suministrados por subcontratistas. Con una cadena de suministro digital respaldada por análisis avanzados de ERP y conectada mediante tecnología IoT, coordinar a socios, proveedores y componentes será más fácil que nunca, lo que permitirá a los fabricantes producir en un día lo que antes tardaba semanas o meses.