El contacto piel a piel es una práctica fundamental en la crianza de un bebé recién nacido que no solo establece una conexión emocional, sino que también tiene numerosos beneficios para la salud y el desarrollo del bebé. En este artículo, exploraremos la importancia de esta hermosa práctica.
El contacto piel a piel, también conocido como método canguro, implica tener al bebé en contacto directo con la piel de los padres, generalmente sobre el pecho o el abdomen. A continuación, se presentan algunos de los beneficios clave de esta práctica:
Vínculo emocional: El contacto piel a piel fortalece el vínculo emocional entre padres e hijos. Permite que el bebé sienta el calor y el latido del corazón de sus padres, lo que proporciona consuelo y seguridad.
Regulación de la temperatura: La temperatura corporal del bebé es mejor regulada cuando está en contacto piel a piel con un adulto. Esto es especialmente importante en los primeros días de vida, cuando los bebés tienen dificultades para regular su propia temperatura.
Estabilidad cardiovascular y respiratoria: El contacto piel a piel ha demostrado estabilizar la frecuencia cardíaca y la respiración de los bebés prematuros o enfermos, lo que puede ser crucial para su recuperación.
Fomenta la lactancia materna: El contacto piel a piel inmediato después del nacimiento puede ayudar a iniciar la lactancia materna con éxito. Los bebés son más propensos a buscar el pecho de la madre cuando están en contacto piel a piel.
Alivia el estrés: El contacto piel a piel libera hormonas que reducen el estrés tanto en el bebé como en los padres. Esto puede ser especialmente útil en situaciones de parto y postparto.
Estimulación sensorial: Los bebés exploran su entorno a través de sus sentidos. El contacto piel a piel proporciona una estimulación sensorial rica que promueve el desarrollo cognitivo y emocional.
Fortalece el sistema inmunológico: Se ha sugerido que el contacto piel a piel puede ayudar a fortalecer el sistema inmunológico del bebé, ya que se le expone a las bacterias beneficiosas de la piel de sus padres.
Reducción del llanto: Los bebés que tienen contacto piel a piel tienden a llorar menos y estar más tranquilos. Esto puede ser reconfortante tanto para el bebé como para los padres.
Es importante mencionar que el contacto piel a piel es beneficioso tanto para las madres como para los padres. Esta práctica fomenta la participación activa de los padres en el cuidado del bebé y les brinda la oportunidad de fortalecer su vínculo con su hijo.
En resumen, el contacto piel a piel es una práctica hermosa y beneficiosa que puede mejorar la salud y el bienestar de tu bebé recién nacido mientras fortalece los lazos familiares, señala Minenito. No dudes en hablar con tu profesional de la salud para obtener más orientación sobre cómo implementar el contacto piel a piel de manera segura y efectiva.