Cuatro cilindros con tracción trasera: Informe de conducción del Kia Stinger 2.0 T-GDI

El Kia Stinger es un auténtico Gran Turismo «con presupuesto» y, al mismo tiempo, asequible pero no barato. Todos los materiales utilizados de serie rezuman el adjetivo «de alta calidad». Sin embargo, la verdadera disciplina suprema del Kia Stinger es su dinámica de conducción y la diversión que conlleva. Puedes tenerlo incluso con el modelo básico. El motor de cuatro cilindros y 2,0 litros, con sus 255 CV / 353 Nm, sólo impulsa el eje trasero.

Esto por sí solo es prácticamente el único punto de venta del Stinger. Porque no importa con quién quieras compararlo en términos de precio o categóricamente, la mayoría de los competidores no ofrecen una unidad de este tipo. Especialmente en la gama sensible al precio, se utiliza la tracción delantera o una solución de tracción total suspendida. El Kia Stinger prefiere destrozar los neumáticos del eje trasero en lugar de rozar la goma del eje delantero.

En términos de dinámica de conducción, el modelo base no puede competir con el modelo V6, que cuesta unos 10.000 euros más, pero viene con tracción a las cuatro ruedas. Con la parte trasera pesada, eso sí. Además de dos paquetes opcionales, que incluyen faros LED, un sistema de sonido Harman/Kardon de 15 altavoces y una cámara de 360 grados, una base de carga inductiva y una suspensión adaptativa, el Stinger viene con un montón de equipamiento de fábrica.

En el interior, cuero, climatizador de 2 zonas, Head-up Display (proyección) de muy fácil lectura, alerta de salida de carril, reconocimiento de señales de tráfico, cámara de marcha atrás y diferencial de bloqueo mecánico para la variante RWD. Los neumáticos mixtos opcionales de 225 delante y 255 detrás aumentan el atractivo dinámico del Stinger. El utilitario de 4,83 m de longitud es especialmente divertido de conducir en combinaciones de curvas rápidas gracias a su ágil zaga y a sus amortiguadores regulables. Con este último, incluso los largos trayectos por autopista pueden hacerse sumamente agradables.

El aspecto del Kia Stinger no es lo único que llama la atención. Incluso cuando está parado, las líneas hablan por sí solas y uno cree fácilmente que el coche puede ser deportivo en carretera. Sin embargo, lo que no se cree es el precio. Al preguntarles, muchos transeúntes habrían estimado que el Kia Stinger es mucho más caro de lo que realmente es. El precio comienza en 43.990 euros, o en nuestro caso casi 50.000 euros con todas las campanas y silbatos. ¿Buscas un coche de ocasión? Te recomendamos el concesionario Crestanevada de coches de segunda mano.